Emociones positivas. La visión budista

Cuando los futbolistas meten goles se abrazan. ¿Por qué? 
Cuando estas contento por una buena noticia, tienes ganas de contarlo y te sientes más abierto a los demás.
Esto ocurre porque cuando estamos felices somos propensos a querer a os demás y a su vez cuando queremos a la gente, somos felices. 
Es decir, que al contrario que ocurre con los sentimientos negativos, los positivos nos hacen ser felices.

En el budismo se pone mucho énfasis en intentar potenciar estos sentimientos y se les llama "Los cuatro inconmensurables estados de la mente". Son tanto un medio como un fin, pues sentir estas emociones nos ayudan en el camino de la práctica y el resultado final de ella será disfrutar de estos estados de una forma continua.

Amor
El amor se entiende como el deseo de que la otra persona sea feliz. Así se refiere a un amor altruista y no egoísta. Por tanto, no encaja en el amor pasional, que es posesivo, ya que la persona ama a alguien, pero siempre y cuando le corresponda y este a su lado. Un ejemplo de amor altruista es el que sentimos por los niños, o en menor medida por los animales.

Compasión 
Se define como el deseo de que la otra persona no sufra con lo cual es un sentimiento altruista. Debe alejarse sin embargo del sentimentalismo, pues entonces deja de ser efectivo. Este deseo  de que los demás no sufran debe entenderse desde la sabiduría, debe operarse desde el vigor y la firmeza, y sin dejarse llevar por la ira, el rencor u otros sentimientos que puedan aparecer ante situaciones que entendamos injustas. Así, si viéramos a una persona siendo maltratada por otra, buscaremos ser compasivos y no querer que sufra, siendo firmes y enérgicos en nuestras acciones, pero sin sentir ira hacia la persona opresora.

Alegría 
La alegría se entiende mejor quizá con la palabra contento, es decir no es un sentimiento que aparece por una causa externa y ocasionalmente, sino una felicidad interna. Así todas las acciones que realicemos deben de estar inundadas de este contento, que nos llenara a nosotros y aquellos con los que compartamos nuestra vida.
Es especialmente positiva la alegría compartida, que es cuando nos alegramos sinceramente de las cosas positivas que le ocurren a los demás, sin que nos invada la envidia o la comparación.
Ecuanimidad
La ecuanimidad se entiende desde el punto de vista de la serenidad y el desapego, no desde el de la indiferencia. Es decir se es ecuánime, cuando no nos dejamos arrastrar por aquello que nos gusta o por lo que nos disgusta, sino desde la aceptación serena de lo que ocurre. El ejemplo más claro de ecuanimidad es cuando una persona no se ve alterada ni por los elogios que le den, ni por las críticas, por muy duras que sean. Escucha tanto unas como otras y las analiza, por lo que no es indiferente, pero no se siente afectado anímicamente ni perturbado por ellas.
 

¿Cómo se tratan las emociones negativas?
Tienen un tratamiento similar al de las emociones negativas y en algunos puntos idéntico, pues si uno potencia las positivas también está disminuyendo las negativas. Por lo tanto, también se tratan antes, durante y después.

Antes de su aparición.
Para intentar que estas emociones positivas aparezcan lo máximo posible podemos practicar las meditaciones Metta y Samatha. Recordamos que Metta significa amor incondicional y consiste en intentar extender el amor a todos los seres.
Otra forma de alejar estas emociones es tener una visión de la vida positiva, optimista y no ver la vida por la parte más negativa, pues esto hace ser receloso. 

Durante su aparición.
Es importante no apegarse a la emoción, porque con ella nos sintamos bien, pues como todo es impermanente y desaparecerá. Simplemente se debe reconocer, observar y dejar ir cuando desaparezca, pues es imposible mantenerla para siempre.
También es importante mantener la atención y no dejarse embargar por la emoción, hay que disfrutarla conscientemente, como cuando se saborea un helado, dándonos cuenta de ello.

Después de su aparición.
Cuando la emoción ha desaparecido podemos hacernos las siguientes preguntas, que nos ayudarán a gestionarlas mejor en otra ocasión.
¿Por qué ha aparecido la emoción positiva?
¿Se debe a un elemento externo o es debido a el trabajo interior que estoy realizando?
¿Qué puedo hacer en el futuro?, para que aparezca de nuevo.



Bibliografía

-La esencia del Amor.Tchich Naht Hanhn.Ed. Oniro
-Los siete pasos hacia el amor. Dalai Lama. Ed. Circulo Lectores



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